Cultura

LOS NOGALES

Por amor al folclore: volvió a bailar después de 3 años y fue a Cosquín con Embrujo de mi Tierra
Emilia Amorós es de Los Nogales y comenzó desde muy pequeña a bailar folclore, se recibió de profesora en el IDAF y viajó recientemente a Cosquín con ese ballet taficeño

VIERNES 14 DE FEBRERO DE 2020 · 09:07 HS

María Emilia Amorós nació y aún vive en Los Nogales, comenzó a bailar folclore desde muy pequeña por decisión de sus padres: "Mi mamá Beatriz Herrera y mi papá José Amorós tuvieron mucho que ver, ellos me inculcaron lo que es el folclore. Ya viene de familia" comenta. Se recibió de profesora en el IDAF a los 16 años y recientemente viajó a Cosquín con Embrujo de mi Tierra, junto a su hija Isabella y su esposo Emilio Sanchez

¿En qué Academia empezaste y cómo llegaste a ser profesora de folclore?  

Comencé a los 7 años en la Academia la Telesita en Los Nogales que estaba dirigida por el profesor Héctor Jaime y a los 16 años me recibí de profe de folclore en el IDAF, con el director Nicolás Brizuela

Estuve hasta los 18 años en esa academia porque se desarmó. Justo me entero por unos chicos que venían a bailar de otro lado que estaba Embrujo de mi Tierra, no lo conocía al profesor, me mande sola y en el 2012 comencé con Fredy Arroyo y después por mi bebé dejé 3 años. Recién el año pasado volví. 

¿Cómo fue tu experiencia de ir por primera vez a Cosquín? 

Es el primer año que voy y fue hermoso, una experiencia única. Lloramos en la ida y en la vuelta, fue cansador pero valió la pena.  Llegamos tipo 19 horas de ese jueves y a las 21 teníamos que ir a la una Peña, nos cambiamos, peinamos, maquillamos y fuimos a una presentación. Luego salimos y terminamos de bailar en los espectáculos callejeros y después nos invitaron a la Peña Oficial. 

El día 31 bailamos estuvimos en el Patio de Cosquín con Horacio Banegas y Jorge Rojas, también cuando cantó con Abel Pintos. Fue muy hermoso, toda la gente te miraba y saludaba, algunos lloraban por la emoción. A nosotros nos dijeron que bailar como bailamos vale la pena ver porque le ponemos muchas ganas y llevamos alegría a Cosquín 

Ví que armaron los taficeños una "Peña" en Cosquín ¿Se pusieron a bailar al lado del río cierto?

Hubo grupos de aquí, mucha gente de tafí, chicos que bailaban en otras academias y se acercaron a saludarnos. Además  se sumaron cantantes que compartieron el asado el día domingo y de ahí se armó una guitarreada y nos pusimos a bailar. Estuvo muy lindo.  

Lo mejor fue que nos tocaron la canción que nosotros bailamos en el festival y la zamba en el río. Estuvo muy lindo, compartimos muchas cosas juntos entre los tucumanos y taficeños. 

¿Como lo ves vos al folclore hoy en día aquí en Tucumán y como lo ven de afuera en Córdoba al folclore tucumano? 

Ellos bailan sus danzas más tradicionales que nosotros, aquí le agregamos coreografías, allá bailan en todo momento por ejemplo el Gato o la Chacarera  y otras danzas tradicionales que acá comúnmente no las ves de esa forma.

¿Qué opinás del estilo de folclore taficeño de Fredy Arroyo?

Lo que hace Fredy es hacer un cuadro de lo que fue la vida del ferroviario, o como en "Corazón de Limón", donde nosotros mostramos cómo se cosecha ese limón, difundiendo esa temática para que conozcan más de Tucuman porque hay gente que no lo sabe. Nosotros en la pantalla proyectamos el vídeo, mostramos más o menos pero hay gente que a veces no lo entiende. 

A futuro ¿Cómo te gustaría seguir tu carrera en el folclore?

Me gustaría poner una academia en Los Nogales. Hasta el momento no me animaba, porque sé que es mucha responsabilidad. 

¿Un mensaje para tus vecinos?

Manden a sus hijos a folclore porque esta danza es muy hermosa, ellos siempre la llevarán en el corazón. Mirá todos esos escenarios que uno pisa y que nunca pensamos en llegar, que se animen porque el folclore es muy hermoso y te deja muchos recuerdos, te llena el alma. Bailar es una pasión que solo los que lo practicamos lo sabemos. 

Agradecimientos: 

Agradezco profundamente el apoyo de mi marido Emilio Sanchez, que es un gran compañero que me bancó en todas y también a mi hija Isabella, a pesar de ser tan pequeña se portó muy bien. A mi mama es Beatriz Herrera y mi papa Jose Amoros, ellos siempre me ayudaron también a cuidarla a mi hija cuando tenia que ir a los ensayos.

Un agradecimiento especial a mis compañeros por su compromiso y disposición, tantos a los del ballet como al Taller de Adultos. También para los jóvenes invitados que se sumaron a nosotros de la cuidad y de otras provincias. 

Quiero agradecer profundamente a Magdalena Gonzalez que es una excelente persona, amable y muy buena. Siempre atenta y presente en cada detalle. Y a mis profesores Fredy Arroyo y Luis Robledo que gracias a él nosotros pudimos concretar este sueño de brillar en el escenario del patio de Cosquin.